En el Castellón se ha dado cita todas las cultaras. En este cerro redondo ya habitaron los hombres del paleolítico. Por aquí pasaron los romanos, que construyeron el puente romano para comunicar el grupo que en entonces vivía en la zona de Valdepeñeras con el del Castellón. Aquí vivieron los visigodos, que nos trajeron el cristianismo. Aquí se instalaron los árabes durante varios siglos, y llenaron las vegas de acequias, de las que recuerdo haber visto algunos restos. En este cerro para mi tan querido, hicieron los árabes un castillo, que se comunicaba , mediante un túnel, con el rio Susana, por donde podían escapar en el caso de que el castillo fuera asaltado. Se llamaba el castillo de Susana por el rio que pasaba junto a él y a su vez, Sasana viene del latín “”saxa, roca, fortaleza, que por una deformación fonética se trasforma en Susana, dando el nombre de Susana al rio que pasaba por el castillo-fortaleza. El Castellón es un símbolo de nuestra cultura. Si sus piedras nos hablaran, nos descubrirían los misterios y secretos de nuestro pasado. Por conquistar es cerro tan pequeño, hubo muchas guerras entre cristianos y moros. Aún recuerdo la cantidad de muertos, que se descubrieron las máquinas al arreglar el camino de Chircales. La Mayoría eran jóvenes, porque tenían la dentadura completa.
