jueves, 28 de junio de 2007

GORDOLOBO


Repito las fotografías para verlas desde perspectivas distintas. No es muy abundante en Valdepeñas. Hay muchas plantas en lo alto de los Nevazos. Se cría en los taludes, pero con las curas han desparecido. Estas fotos se pueden contemplar al natural desde el puente de la carretera que va al Castillo, en los mismos acantilados de la izquierda. Su uso es emoliente y cicatrizante. Se usa su cocción con la zahareña para la hemorroides, haciéndose lavados frecuentes con la infusión. Esta misma receta la usan en otros pueblos de una forma distinta: En aceite de oliva virgen se dejan en maceración las zahareña y las hojas y flores de gordolobo durante dos meses y con un algadón se pasa la tintura por la herida. En Valdepeñas se usaban sus hojas secas como una yesca para encenderla con la chispa del pedernal. Era un rito ver al fumador, hacer su pitillo a mano, y encenderlo con este artilugio. ¡Los tiempos no son los de ahora!. En la antigüedad los tallos secos del gordolobo, se untaban de sebo y con ellos se hacía antorchas, que iluminaban las fiestas nocturnas y mágicas.